En Greenbox abordamos el rediseño paisajístico como una oportunidad para revitalizar los espacios y darles nueva vida sin perder su esencia. Nuestro proceso inicia con un diagnóstico detallado del sitio, evaluando las condiciones actuales del terreno, la vegetación existente, los flujos de uso y la relación del espacio con la arquitectura y el entorno.

Con base en este análisis, desarrollamos una propuesta integral que conserva los elementos valiosos, incorpora mejoras funcionales y estéticas, e introduce especies mejor adaptadas a las condiciones del lugar. La selección se realiza bajo criterios de sustentabilidad, eficiencia en mantenimiento y coherencia con la identidad del proyecto.

La ejecución se lleva a cabo con precisión y respeto por el espacio, cuidando cada detalle desde la sustitución de plantas hasta la implementación de nuevas soluciones de riego, iluminación o mobiliario. El resultado es un paisaje renovado, que mantiene su carácter original pero responde a las necesidades actuales, aportando valor estético, ambiental y social.

En Greenbox, un rediseño no es solo una actualización: es la transformación de un espacio en un entorno armónico, sostenible y preparado para perdurar en el tiempo.